
No a los pogromos racistas e islamófobos en Torrepacheco. Basta de complicidad con el fascismo.
Jóvenes Izquierda Unida denunciamos los pogromos racistas y la complicidad institucional: no callaremos ni nos quedaremos quietos ante el fascismo.
Jóvenes de Izquierda Unida quiere expresar la más enérgica condena ante los graves sucesos ocurridos en Torre Pacheco que empezaron la noche del 11 de julio de 2025, y que continuan en estos momentos, en los que grupos neonazis recorren el municipio atacando a personas migrantes.
Estos pogromos racistas son un nuevo episodio de violencia y odio que debe alarmar a toda la sociedad. En un momento de criminalización de la migración, racismo e islamofobia, la extrema derecha ha empleado un bulo racista sobre una agresión a un anciano que no es del vídeo que se ha difundido, atribuyendola falsamente a un grupo de jóvenes migrantes marroquíes. Esto ha movilizado a grupos neonazis de todo el Estado que estos días organizan “cacerías” en Torrepacheco.

https://twitter.com/islamenmurcia/status/1944045052784709679
Esta estrategia de la ultraderecha para movilizar odio no es nueva, e irremediablemente nos recuerda a los episodios vistos en julio de 2024 en Southport, Inglaterra, en la que se señalaba falsamente al autor de un crimen de apuñalamiento a un inmigrante musulmán solicitante de asilo y que provocó también un episodio de pogromos racistas e islamófobos.
De la misma manera que pasó en Inglaterra, no importa que las autoridades hayan desmentido rápidamente las informaciones, a la ultraderecha no le importa la verdad, ni la seguridad, sino crear un clima de caos en el que sembrar el odio.
Señalamos al Gobierno de la Región de Murcia y a las formaciones de derecha y extrema derecha que ocupan las instituciones por su complicidad y connivencia con los grupos nazis que están recorriendo las calles. Son los responsables directos de alimentar un clima social envenenado, en el que se señala, se criminaliza y se pone en peligro la convivencia mediante bulos, discursos xenófobos y políticas excluyentes. El PP de López Miras, en lugar de frenar esta deriva, ha optado por ser cómplice necesario con su silencio, su inacción o, peor aún, con su sumisión política a los dictados de Abascal y Vox, con el visto bueno de Feijóo desde Madrid.
La juventud trabajadora no se traga el discurso de la extrema derecha, porque la juventud trabajadora también es migrante, es plural y es diversa.
Ante la violencia racista, llamamos a la autodefensa migrante y popular: la única respuesta posible a esta agresión contra nuestro pueblo es defendernos allá donde no están llegando las autoridades. No vamos a permitir que escuadristas fascistas, como hace un siglo, organicen cacerías de migrantes y queden sin respuesta, o con una tibia regañina por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, como estamos viendo estos días. La complicidad institucional y los dobles estándares conducen a la polarización social.